viernes, 18 de junio de 2010

La bella Tania

Mientras bebia algo en un puesto del tradicional batido guayaco, esperando algo que debia suceder, vi pasar en un bus a una de aquellas personas que forman parte del ayer y de mi basto repertorio. No esta bien que me vanaglorie, pero a pesar de lo que muchos podran pensar he disfrutado de la simpatia de las mujeres y les he devuelto aquello en largas e intensas jornadas, en fin por cosas de la vida el bus se paro unos momentos y ella quedo justo frente a mi, no creo que me haya visto ya que se encontraba concentrada en quien sabe que cosas, aunque tambien es posible que si, ya que las mujeres son expertas para disimular. La vida y el tiempo la han cambiado, aunque ahora se ve mucho mas madura y los años no han pasado en vano por su cuerpo que ha traido tres hijos al mundo, sigue conservando esa peculiar belleza que me enloquecio en unas epocas lejanas.

Eran las epocas que definieron lo que soy ahora, la conocí cuando todavía mantenía la mas nefasta y tortuosa relación que jamas haya tenido antes o despues, fue precisamente ella quien me la presento ya que no solo eran amigas sino compañeras de trabajo; desde el primer momento hubo esa magia, fue precisamente en su casa, habían invitado a mi ex a una fiesta que justamente ella le organizaba al entonces pelele de turno, apenas y nos conocimos sentí que algo nacío, aunque ambos teníamos pareja presente no se hicieron esperar los mutuos coqueteos, pensandolo bien esa siempre ha sido una constante, sobre todo en aquella oscura epoca donde la costumbre y el sadico deseo de hacernos daño, me mantenía junto a alguien sin amor.

Luego de aquella noche en la que intercambiamos los telefonos, empezamos a chatear y luego de días las visitas a su casa, en un principio fue algo incomodo ya que había estado alli varias veces antes, pero por su hermana, con la que tuve un breve romance tiempo antes, hasta esa vez no la había visto interesante, a mas de un saludo no recuerdo haber cruzado palabras. Si la noche de la fiesta lucía bella, en esta ocasión estaba despampanante, llevaba un pequeño short jean que apenas y cubria las partes intimas y se detenía en los limites entre las piernas y el delicioso trasero que luchaba por romper aquella apretada barrera. La hermana quien por obvias razones pensaba que iba por ella, y no lucía menos provocativa, me saludo y al ver nuestra actitud paso de largo extrañada. La verdad no estaba vestida así para recibirme, solo era la costumbre al estar en casa. Desde entonces las visitas se hicieron mucho mas frecuentes y las conversaciones mas fuertes, el libido flotaba en el aire.

En una de aquellas salidas le di el primer beso, ella estaba ruborizada y aunque no le creía decía sentirse avergonzada por lo que estabamos haciendo a su amiga, no le creí pues los cargos de conciencia vienen despues del goce, ella sabía bien los multiples líos entre emi ex pareja y era alguien con quien se podia platicar de todo, mientras pasaban los días los besos y las caricias crecían en intensidad, estabamos jugando a ser infiles y nos encantaba esa sensación. Hasta que un día la invite sin mas tapujos a irnos a un motel, era de noche y viajabamos rumbo a casa, en la oscuridad del bus había abierto su blusa y le besaba los erguidos pezones, dado el tiempo lo pospusimos para el día siguiente, las horas pasaron mucho más rapido de lo que esperaba, el unico detalle fue que nunca debí contarle de mi aventura a quien en esos tiempos consideraba uno de mis mejores amigos, crazo error, luego descubriria lo rata que era ya que se lo conto a mi ex, con la que guardaba cierto parentesco al bacilar con la hermana.

Tomamos el bus cerca de medio día hasta Guayaquil, donde tomamos un taxi apenas tocamos tierra, con destino a uno de los muchos moteles que posee, aunque había recorrido muchos tenía mis predilectos, así que fuimos a parar a uno de aquellos. adentro la tenue luz roja la iluminaba dandole un aire angelical, poco a poco las prendas cayeron por el suelo al son de una suave musica, los besos y las caricias fluían desenfrenados, entonces quedo solo en un conjunto interior rojo, un brasier de encajes que dejaba entrever sus grandes y solidos pechos, y un hilo del mismo color y material que era la unica barrera entre nosotros. La tome de sus deliciosas nalgas y seguí bajando con mis labios, recorriendo su tersa piel hasta llegar a sus erguidos y duros pesones, afilados como flechas apuntando hacía mi... no hubo rincón que no conocieran mis manos y mis labíos antes de penetrarla, llegando hasta el punto que esperaba, estaba tan excitada que me pidio que se lo metiera sin piedad... y así fue, luego del primer palo, vinieron tres mas durante algo mas de dos horas, fue una experiencia sin igual para ambos; pero no todo es perfecto, y algo tenía que dañar la velada, mi ex llamo a ambos y nos puso en evidencia, quien creia mi amigo nos había traicionado.

Esa tarde fue el inicio de una relación cargada de muchos e intensos momentos, de mucho sexo, mucha depravación, pero tambien de momentos que rayaban en lo tierno, los cuales fueron como un vaso de agua en medio del infierno que estaba viviendo y que por alguna estupida razón no podía dejar atras, bueno luego he de continuar con un par de aquellas experiencias con esta bella mujer llamada Tania, al igual que otras mas con la gata.

Lo curioso fue que despues de verla vinieron a mi mente imagenes de una pelicula que vi hace algún tiempo, en la cual la trama era que todas las mujeres que se acostaban con el, se casaban con el siguiente en conocer.. si es algo estupido, pero se me vino a la mente ya que al menos el 90% de las mujeres que han pasado por mi vida se han casado despues de haberlas dejado entrenadas en las artes del amor, algunas aún me visitan, pero eso, eso ya es otra historia...

No hay comentarios:

Publicar un comentario